Diseño vital para fluir en la vida
Equivocarse para tomar consciencia
Hoy me siento derrotada,..y un poco triste, decepcionada. Después de todo el trabajo, después de todas las prácticas,…me doy cuenta de patrones internos, conscientes e inconscientes que me llevan a hacer cosas que realmente no quiero. No es que sean totalmente contrarias a mi, sino más bien ligeramente contrarias. Eso es lo que las hace peligrosas a mi entender, pues de forma sutil, modelan mis horas, mis días, mi vida.
En este caso se ha tratado de unas horas. Horas valiosas, que me gustarían haber empleado en conectar con personas que amo, en cultivar la intimidad, cuidar y reparar vínculos,….y en cambio, las dediqué a tareas de delante del ordenador.
Seguir adelante
Decido perdonarme y al mismo tiempo renovar mi intención de alinear mis acciones con mis valores y prioridades vitales. Para ello, siento que necesito hacer un trabajo de visionado de mi vida en los próximos. Hace unos 15 años que realizo esta práctica y he sido testigo una vez y otra de su poder. ¿Porqué desarrollar una visión sobre la vida que queremos es poderoso? Pues porque al visionar nuestro futuro, lo estamos creando. Lo creamos en nuestro consciente e inconsciente lo que nos facilita reconocerlo y expresarlo en nuestra danza vital. Visionar nuestro futuro también es una forma de suspender creencias limitantes que nos impiden querer aquello que realmente queremos.
Pasos para el diseño vital
Existen tres dimensiones en cualquier proceso de diseño vital:
Dar cuenta del estado actual de nuestra vida
Describir la vida futura que queremos
Crear estructuras (horarios, hábitos, relaciones…) hacia nuestra visión.
Como describe Robert Fritz en The Path of Least Resistance, no basta con visionar, sino que es necesario crear estructuras en nuestra vida que hagan inevitable la realización de nuestra visión.
Aceptación, el primer paso
A menudo mirar al futuro resulta un paso avanzado. Preguntarnos aquello que deseamos realmente, puede ser aterrador, si mi pasado está lleno de cuestiones sin resolver o si vivo en negación sobre mi realidad presente. Por ello, una parte importante de mis programas de coaching consisten en aprender a estar con lo que es, conectar con el momento presente, en su totalidad. Mientras nos queden cosas por aceptar o sanar, no seremos capaces de estar realmente presentes. Es por ello, que la falta de conciencia hace que nos quedemos estancados, sin avanzar, y algunas cosas parece que se repiten una y otra vez en nuestras vidas, pues de hecho así es. A medida que logramos estar, mirar, sentir, todo lo que ya está aquí, seremos capaces de incluirlo y trascenderlo. Entonces el momento presente se convierte en un portal al futuro.
En mi caso, si yo no hubiese reconocido que ayer me equivoqué en mi decisión de como invertir el tiempo, seguramente lo volvería a repetir una y otra vez, hasta que las consecuencias de hacerlo me hicieran parar y mirar.
Coaching integral como estructura
“Si lo puedes soñar, lo puedes crear” decía Walt Disney, y también creo que si no lo puedes soñar, te va costar muchísimo más crearlo.
Mis programas de coaching integral son de hecho una estructura para que la persona a la que acompaño acerque su vida real a la vida que anhela. De seis meses de duración, con sesiones quincenales de una hora y ejercicios y prácticas entre sesión y sesión, damos cuenta de todo lo existe y como nos condiciones en el presente, facilitando o bloqueando nuestro potencial y expresión humana futuros. A medida que la presencia de las personas a las que acompaño aumenta, vamos indagando en aquello que realmente quieren, en sus sueños, sus anhelos, dándole forma a través de distintos medios artísticos y plásticos. Para ello utilizo una multiplicidad de técnicas, desde el circling, el focussing, proceso de símbolos, y otras herramientas del coaching integral.
Una sola vida
Al leer este post, tal vez te preguntes: ¿Por qué complicarnos en diseñar, nuestra vida? ¿Por qué no fluir con ella y dejarse llevar? Mi aprendizaje es porque cuanta más conciencia, coherencia e intención exista en la forma en que vivimos más podremos fluir. De lo contrario, cuanta más incoherencia, inconsciencia y negación acarree en mi, más problemas me traerá el “simplemente dejarnos llevar”. Y también porque como poéticamente expresa Carla Bruni en su Toute le Monde “Tout le monde a une seule vie qui passe, mais tout le monde ne s’en souvient pas”, “Todos tenemos una sola vida para vivir, pero nadie se da cuenta de ello”. De modo que mirar a nuestra vida, profundizar en ella y encauzarla es una forma de darnos cuenta de que solo tenemos una vida que pasa, y así poder darnos a ella, plenamente.
- Published in Uncategorized
Vulnerabilitat i intel·ligència relacional
Quan parlo d’intel·ligència relacional, sovint em pregunten per les claus de la mateixa. Alguns anticipen tècniques sofisticades que els ensenyin a ser més virtuoso en el marc de les relacions. En un món on encara predomina una visió científica més o menys mecancista, no es de sorprendre que tothom vagi a la recerca de la darrera tècnica, la darrera app, la darrera cosa que solucionarà els nostres problemes per sempre més.
I tanmateix, la intel·ligència relacional és fonamenta en la pràctica. Pràctica entesa com realitzar un activitat una vegada i una altra amb l’objectiu de fer-la cada vegada millor, en l’esperit de Martha Graham:
“I believe that we learn by practice. Whether it means to learn to dance by practicing dancing or to learn to live by practicing living, the principles are the same. In each, it is the performance of a dedicated precise set of acts, physical or intellectual, from which comes shape of achievement, a sense of one’s being, a satisfaction of spirit. One becomes, in some area, an athlete of God. Practice means to perform, over and over again in the face of all obstacles, some act of vision, of faibrainheartth, of desire. Practice is a means of inviting the perfection desired.”
Però, quan parlem d’intel·ligència emocional, què és el que hem de practicar?
Doncs essencialment dues coses: Introspecció i Connexió amb els altres, seguint el model de l’Integral Center de Boulder.
Ambdues requereixen de trepitjar un terreny que ens agrada ben poc. El terreny de la vulnerabilitat sobre el qual la brillant B.Brown ha versat tant. Introspecció entrant en contacte amb el món dels sentits, pensaments i emocions. Fer-me amic de la meva experiència per poder-la compartir autènticament, el que requereix coratge per mostrar-se vulnerable a com em pugui sentir, al que puguin pensar, a com puguin reaccionar.
M’ha costat molts anys fer-me amiga de la meva experiència, i alguns més aprendre a compartir-la autènticament. Pràctiques com la meditació, escriure en un diari i passejos en la natura m’han ajudat. També simplement preguntar-me com em sento. Per expressar la meva experiència autènticament m’ha ajudat estat estar en comunitat amb persones que ho feien constantment.
I tu, com ho fas per entrar en contacte amb la teva experiència?
Quines persones i relacions et conviden a expressar la teva vulnerabilitat de forma autèntica? Com et sents quan ho fas?Vul
- Published in Uncategorized